Hugo Baralis - TANGOS SETENTAYTRES

Hugo Baralis
TANGOS SETENTAYTRES

Desde el comienzo de su carrera -y era un pibe- Hugo Baralis ésta, invariablemente, en su verdad, que es también una de las inconmovibles verdades de todo el arte: la emoción.
Se "mete" hasta tal punto en lo que toca que, inevitablemente, termina estremeciendose y estremeciendonos. Pasa, simplemente, que para Hugo su violín tan querido no es una " herramientas" de trabajo sino algo mucho más vital: es uno de sus órganos esenciales. Una víscera cantante que sueña en que dice y que " chamuya" confidencialmente; una derecha de su propio torrente sanguíneo, por cuyas misteriosas pulsaciones nos alcanzan la humanidad, la sencillez, la "calle", la calidez y ese fraterno sentido de sus cosas y de sus días que amasan -desde siempre y para siempre- esta personalidad de porteño a muerte, de auténtico hombre tango, de varón bien abrazado con la aventura del arte y de la vida.
por todo es, y porque era ha sido invariablemente leal así mismo, a su manera de vibrar con los valores estéticos y sentimentales de la música es que su violín sigue siendo inconfundible entre veinte violines; apenas uno lo siente apoyar el arco sobre el cordal y, si la mínima duda, dice: " Ese es Hugo Baralis".
A su modo y el muy buena ley, pues, ha inventado un idioma violínístico en los tangos. Y no hay posibilidad de hacerla más selecta antología de violines de Buenos Aires en la que su nombre no figure junto al de un Elvino Vardaro, un Alfredo Gobbi, un Antonio Agri o un Enrique Camerano. Porque, además, ha sabido sustentar y defender esa condición de estilista innato y su don de emocionar -dos dimensiones que el Conservatorio no da ni presta- con la disciplina de la formación académica, del buen estudio, de la búsqueda apasionada de los seculares secretos de su instrumento. De aquí su excelente afinación, la calidad de  su sonido -terso, parejo, pleno en su dulzura- el equilibrio de su vibrato. Y la sabiduría que le permite profundizar en el discurso melódico valorándolo nota por nota. En suma: viviendo lo que expresa, pero sabiendo cómo es y con qué transmitirlo.
La misma orientación, el mismo buen gusto, la misma autenticidad y -también- la misma intuición que han exaltado aquella condición de ejecutante, son las que le han ubicado como solista distinguido de orquesta fundamentales (Vardaro, Troilo, de Caro, Cobián, el Octeto Buenos Aires, el "Conjunto 9" de Piazzolla). O en las agrupaciones que reiteradamente ha encabezado como director y a las que ha trasmitido como un perfume y como un sello la presencia de su violín.
En este volumen Hugo Baralis presenta a su nuevo quinteto con ocho temas que van desde la obra tanguística clásica ("Nunca tuvo novio", "Los mareados"), a las composiciones contemporáneas del inia romántica ("Anoné", "Adios Nonino", "Tema otoñal") o de fibra más dominantemente canyengue ("Verano porteño", "Ciudad Tango").
Y junto a ese acierto en la elección de los temas, otros dos: la de los tres jóvenes y dotados arregladores (Horacio Valente, Luis di Mateo y Rodolfo Mederos) y la de sus solistas colaboradores: Daniel Binelli (bandoneón), Héctor Console (bajo), "Chocho" Ruiz (guitarra) y Horacio Valente (piano). Aquellos y estos contribuyen a dar vuelo, cimientos y calidades al tratamiento armónico, rítmico y contrapuntístico de los tangos elegidos, en los que se "florea" con toda la gracia, la humildad y la "polenta" que le son características, el violín de Baralis. Tan sensible y comunicativo en los stacattos del más puro linaje milonguero como en su tarea de "fraseador" consumado. Con ese " no sé qué" que Hugo tiene y que separa tajantemente al artista verdadero del simple "funcionario" de un instrumento.
Es un jubiloso reencuentro para todos los que somos hinchas de Hugo Baralis (y una revelación para los que Irán conociendolo y estimandolo), la presentación de este flamante conjunto suyo donde el ratifica todo lo que puede esperarse de un músico con su carrera y con su sensibilidad fuera de lo común, ahora en la plenitud de su violín, de su estilo y de su talento.
Horacio Ferrer
Buenos Aires, agosto de 1973

Hugo Baralis
TANGOS SETENTAYTRES
MH 2410
1973

01. ANONE (Escuchen) - tango - Hugo Baralis
02. CIUDAD NOCHE - tango - Horacio Valente
03. TEMA OTOÑAL - tango - Enrique Mario Francini
04. ADIOS  NONINO - tango - Astor Piazzolla
05. CIUDAD TANGO - tango - Horacio Valente
06. LOS MAREADOS (En mi pasado) - tango - Juan Carlos Cobián, Enrique Cadícamo
07. VERANO PORTEÑO - tango - Astor Piazzolla
08. NUNCA TUVO NOVIO - tango - Agustín Bardi, Enrique Cadícamo

Dirección artística: José Carli
Dirección orquestal y arreglos: Hugo Baralis

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