domingo, 1 de enero de 2017

Néstor Fabián - TANGOS PARA LA JUVENTUD

Néstor Fabián
TANGOS PARA LA JUVENTUD
   
Con el previsto éxito fue recibido por el público el primer disco de larga duración de Néstor Fabián, y la ascendente estrella de este juvenil cantor hace imperativa la entrega del segundo volumen de sus interpretaciones se integra por composiciones "clásicas" de la música popular de la ciudad y por algunas novedades, modalidad que destaca a este artista como inteligente cultor del acervo melódico que dio lustre ayer al lirismo porteño y, a la vez, propulsor de renovadas expresiones de género el arte sencillo, íntimo y emotivo de Néstor es una luz pura que se multiplica en policromía al pasar por el prisma porteño. Lo que es en cierta medida natural en este artista agraciado en plena edad florida, que nació en San Telmo, vive en Avellaneda, alienta a sus colores deportivos favoritos en la Boca y es depositario de las simpatías de las muchachas lindas de todo los demás barrios.
Una empeñosa novelería periodística -justificable por la índole atractiva del protagonista- ha andado en adjudicarle una determinada novia en su ambiente de actuación, otra disimulada novia en tal punto de Buenos Aires, otra misteriosa novia en cuál rincon lejano... Néstor Fabián sonríe. Sonríe y sigue cantando. Y ante un periodista demasiado inquisitivo que llega hasta las puertas de su casa, se concreta a abrazar con ternura a su sra. madre y decir: -Si, claro... Tengo "amores". Pocos pero buenos.
El plural indica que a la vera del impar amor filial, Néstor siente en la raíz del ser el amor por su arte. Aplaudido y reclamado por los públicos, no dispone de muchas treguas para la vida sentimental propia, porque los compromisos artísticos aumentan progresivamente. Pero eso no significa que los latidos de su corazón no estén concertados con la melodía de su canto. En cada interpretación suya existe el trasunto de un romance. Ese romance que en cada alma de muchachos soñador brota al paso de una figura grácil, al intercambio de una mirada profundas o unas sonrisas prometedoras. Ese otro romance que el destino trunca en una ausencia o una inconstancia... La devoción del intérprete lo obliga vivir con igual intensidad la glorificación de la alegría que el responso de la pena.
Hablar de sus amores a un artista que canta tango para la juventud es empezar a hablar de su amor a esos tangos porque sin amor no hay obra ni vocación lograda. Por amor a las heroínas de las estrofas
que canta Néstor las ha convertido en dulces novias simbólicas: la del ofertorio de "El día que me quieras", la "Morocha" que ha hecho inolvidable su patio en el that andar del tiempo; la que empaña de dulce tristeza una milonga de evocación; la ley idilio que se quebró como el cristal, sin que se veaquebrada el vivo recuerdo de las olas románticas de la adolescencia:

Tus sueños y mi voz y nuestra timidez,
Temblando suavemente en tu balcón...

Ya vemos que pueden seguir atribuyéndole novias y romances a Néstor Fabián. Y que él puede seguir aceptando todo eso con sonrisa clara y palabras de simpática paridad, mientras la orquesta afina y él se prepara a cantar. O sea, a reiniciar romances y noviazgos en el mundo maravilloso de la ficción melódica. Y entregarlos en compás del tango a una ferviente juventud -a la que pertenece- para que el tango siga siendo la auténtica voz argentina que pone el corazón a flor de labios.


Néstor Fabián
TANGOS PARA LA JUVENTUD
ODEON LDI 218

01. QUE FALTA QUE ME HACES - M. Caló, A. Pontier, F. Silva
02. SUS OJOS SE CERRARON - C. Gardel, A. LePera
03. HOY CREO EN DIOS - R. Pansera, R. Lambertucci
04. MILONGA TRISTE - S. Piana, H. Manzi
05. NADA - J. Dames, H. Sanguinetti
06. EL DIA QUE ME QUIERAS - C. Gardel, A. LePera
07. LA CALESITA - M. Mores, C. Castillo
08. LA LUZ DE UN FOSFORO - E. Cadícamo, A. Suárez Villanueva
09. ANTES DEL ADIOS - R. Nievas Blanco, E. Majul
10. EL PATIO DE LA MOROCHA - M. Mores, C. Castillo
11. DAME UN MOTIVO - J. Finkel, S. Soldán
12. CRISTAL - M. Mores, J. M. Contursi

con Orquesta Dirección Roberto Pansera

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Aporte de Ariel González

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