Run...run, run...run...Y el tremolar sonoro
del vuelo audaz y como un dardo, intenso,
surgió de pronto, ante una flor suspenso,
emigrante ascua de esmeralda y oro.
Fue color... luz... color... A un brusco giro,
un haz de luz lo arrebató al soslayo,
y al desaparecer con aquél rayo
su ascua fugaz carbonizado en zafiro
Leopoldo Lugones
El run...run...luz y color...
Ahora, otros hombres de Córdoba, cuatro hombres jóvenes, lo han convertido en canto.
Omar Ramón Jara, Domingo Albornoz, Juan Andrés Flamini y Carlos Dario Salto, unidos en un anhelo común de trascendencia, han buscado el simbolismo del pájaro sin trinos para nombrase.
Creemos adivinar la intención.
El canto -vocación misteriosa- rescata para el hombre, desde las vetas escondidas del silencio, las significaciones más hondas.
Y el "rundún" es silencio. Un silencio bordado en esmeraldas y oro. Y es el canto el que encuentra la razón del silencio. La primera resonancia del dolor, de la alegría. Es el grito profundo que se eleva desde el vértigo del triunfo o del abismo.
El canto reside en las cosas, en todas las cosas y el que canta es porque ha sabido llegar hasta la intimidad que las define.
Llegar de la manera más simple. Por el camino inagotable del sentimiento. Ya lo decía Unamuno: "el hombre es fundamentalmente un animal sentimental".
Y desde allí descubre la melodía siempre germinal de la tierra, la palabra detenida en los labios. Descubre la pena escondida que hace nido brillante en los ojos y la risa que, por un derecho esencial, duerme en la boca fragante de los niños. Descubre el amor en el peso silente de la estrella, lo descubre en la mano temblorosa que corta la flor si lastimara, lo descubre los pasos callados que caminan la tarde sin dirección y tiempo. Y descubre también ese otro amor por el que se entrega la vida, frente al cual los bienes materiales no cuentan y el amor se hacen patria y la patria se hace amor. De la amor se hace hombre y el hombre se hace amor. Y el amor se hace canto y el canto se convierte en el libro del amor. De ese amor por el cual vale la pena vivir y también morir.
Sin emoción no hay canto, por lo menos canto verdadero.
Y es allí donde encontramos a Los Rundunes, entroncados con las vetas primigenias del canto. Con un estilo propio, que les permite identificarse con una particular forma expresiva. La manera no es nueva ni vieja, como tampoco lo es la belleza. Es simplemente su manera, la resonancia de una interioridad que pugna por hacerse mensaje.
Francisco Berra
Los Rundunes
VOLUMEN 2
Music Hall 2496
1975
01. HOY TE RECUERDA MI CANCION-canción-Juan Andrés Flamini, José García
02. DIMELO TU SEÑOR-canción-Ricardo Sherata
03. LAS MARGARITAS-ranchera-Alfredo Pelaia, Domingo Pelle
04. REQUIEM PARA UN POETA-serenata-Armando Freyre, Pancho Berra
05. LA FLOR DEL JAZMIN-canción-Chango Rodríguez
06. VANA ILUSION DE AMOR-canción-Francisco Mario Tropea
07. EL ABUELO-canción-Alberto Cortez
08. RECUERDAS, ERA FEBRERO-canción-Darío Martel, Ariel Petrocelli
09. AZUL JACARANDA-canción-María Isabel Alegre, Ariel Petrocelli
10. CANCION PARA UNA AVENTURA-canción-Oscar Valles
11. JUAN HACHERO-canción-Romero Maciel, Néstor César Miguenz
12. YO VENDO UNOS OJOS NEGROS-vals-popular, recopilación Hilario Cuadros
http://www.mediafire.com/?8206q64fzadv1
Aporte de Kiko Mansilla (folclorecordobes.blogspot.com)
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